No todos los días se tiene la oportunidad de ver cómo el sol se despide desde lo alto de una muela, en mitad de la naturaleza, sin ruidos, sin prisa, sin nada que interfiera. Pero en Alarilla sí. Y es uno de esos planes sencillos que sorprenden por todo lo que te hacen sentir.
Si te alojas en Apartamentos Rurales El Pedregoso, no puedes perderte la experiencia de subir a La Muela de Alarilla al atardecer. Es uno de esos momentos que no necesitan filtros ni grandes palabras: basta con estar allí para entender que algo cambia.
¿Qué tiene de especial La Muela de Alarilla?
La Muela de Alarilla es una gran formación rocosa que domina el paisaje. Desde arriba, se ve el valle del Henares extendiéndose hacia el horizonte, con pueblos, campos y sierras en todas direcciones. A cualquier hora del día es bonito, pero cuando llega el atardecer, algo ocurre: el cielo empieza a teñirse de colores cálidos, el aire se vuelve más suave, y todo parece calmarse.
Y entonces te das cuenta: estás en uno de esos sitios que invitan a parar, a respirar profundo y a mirar. Sin hacer nada más.
Un lugar para desconectar de verdad.
Vivimos rodeados de ruido. Literal y mental. Y encontrar un lugar donde todo se apaga es un regalo. La Muela no necesita artificios. No hay bares, ni tiendas, ni cobertura en algunos puntos. Solo hay piedra, viento y vistas abiertas. Y es precisamente eso lo que hace que funcione tan bien: te obliga a bajar el ritmo.
Subir a La Muela es una forma sencilla de reconectar. Con uno mismo, con la tierra, con el presente. Es ese tipo de plan que parece pequeño pero que deja huella. Porque no hay nada que distraiga. Solo tú, el entorno y el paso lento del sol hacia el horizonte.

No solo paisaje: también historia y vuelo
La Muela de Alarilla no es solo un lugar bonito para ver la puesta de sol. Es también un sitio con historia y con vuelo, en todos los sentidos.
Desde hace años, es punto de encuentro de amantes del parapente, que vienen aquí a lanzarse al aire desde su cima. Si tienes suerte, verás cómo alguno despega justo delante de ti, en un silencio absoluto, mientras planea por encima del valle.
Pero incluso si no hay vuelos ese día, basta con imaginarlo. Hay algo en ese lugar que te da alas, aunque no te despegues del suelo.
¿Cómo llegar?
Desde El Pedregoso, tienes varias opciones para subir:
– A pie, en una caminata tranquila de unos 35-40 minutos, ideal para disfrutar del camino, el paisaje y hacer algo de ejercicio.
– En coche, en unos 10 minutos, tomando una pista que te acercamos encantados si nos preguntas.
La ruta no tiene dificultad, y lo mejor es subir un poco antes del atardecer para llegar con tiempo, encontrar un buen sitio, y dejar que el momento llegue solo.
Te recomendamos llevar algo de abrigo si refresca, calzado cómodo y, si quieres, una manta para sentarte en el suelo. Y, por supuesto, el móvil en modo avión.
Volver diferente
Lo más bonito de todo es que, cuando bajas de La Muela, no vuelves igual. Vuelves más tranquilo, más conectado, más presente. Como si algo se hubiera recolocado dentro.
No es algo que se pueda explicar del todo. Es mejor vivirlo.
Ven a descubrirlo
En Apartamentos Rurales El Pedregoso nos encanta recomendar planes así. Porque no se trata solo de dormir bien o de estar en un entorno bonito. Se trata de vivir experiencias que dejen recuerdo, y de volver a casa con algo más que fotos.
Subir a La Muela al atardecer es uno de esos planes que no fallan. No cuesta nada, está cerca, y te regala algo que cada vez valoramos más: un rato de paz y libertad.
Si estás planeando una escapada rural, apunta este momento en tu lista. A veces, lo más sencillo es lo más transformador.